domingo, 15 de julio de 2012

Pisto de calabacín picante

Mis días de visita al pueblo de mis padres comienzan con el verano.
Me encanta estar allí . Puedo desconectar y descansar. Me enfundo mi "traje de campo" y me dedico todo el día a vaguear, a tomar el fresco, a estar con mi perra,...
Y lo que más me gusta: las noches cenando en la huerta. El aire corre casi haciendo frío; la parra por encima da un tono verde a todo; los almendros a lo lejos; y un montón de plantas sembradas que no tengo ni idea de qué son.
Así que voy inspeccionando y veo un tomate por allí, un calabacín por allá, un pimiento más allá...y así hasta que consigo identificar todo.
Hay que aprovechar lo que nos da el verano, y qué mejor receta que la del pisto, que  incluye todo lo que nos regala la tierra.



Ingredientes:
- 1 calabacín grande ó 2 pequeños
- 1 cebolla grande
- 2 pimientos verdes
- 2 pimientos rojos
- 2 ajos
- 3 zanahorias
- 1kg de tomates maduros pelados
- 2 cayenas
- Aceite de oliva
- Sal
- Azúcar 


Lavamos y picamos todas las verduras y hortalizas, menos los tomates. A mí me gusta que se noten, así que suelo hacer trozos grandes.
En este caso da igual el orden en el que las rehoguemos ya que están mucho tiempo y les da tiempo a hacerse a todas.

Echamos todo en la sartén en la que hemos calentado un poco de aceite.


Dejamos rehogar hasta que veamos que está toda la verdura casi hecha, blandita. No dejamos que se deshaga, ya que luego seguirá cociendo con el tomate.

Pelamos los tomates y los cortamos en trozos. Yo tenía tomate en conserva y utilicé ese, pero anteriormente tuve (bueno, más bien mi madre) que hacer el mismo proceso.


Vertemos en la sartén con la demás verduras y dejamos que cueza hasta que reduzca. Echamos sal y azúcar (para contrarrestar la acidez) a gusto de cada uno.



Añadimos un par de cayeras troceadas.


Dejamos que se cocine un poco más para que coja el sabor picante.


Y ya está preparado nuestro pisto de calabacín picante.


A mí me encanta comerlo templado tirando a frío y acompañarlo con un trozo de queso curado manchego y un buen pedazo de pan. Creo que son la pareja ideal, sobre todo si el pisto es muy dulce.







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